Guía para indagar cómo te hablás a vos misma
Descubre los patrones de tu diálogo interno y aprende a transformar tu voz interior en una aliada.
¿Qué es el diálogo interno?
Es esa voz que tenés adentro, la que te dice cosas todo el tiempo. A veces te alienta, a veces te critica, pero siempre está ahí. Conocer cómo te hablás a vos misma es clave para tu bienestar emocional.
¿Por qué es importante?
- Tu diálogo interno influye en cómo te sentís y actuás
- Puede ser tu mejor aliada o tu peor enemiga
- Te ayuda a conocerte mejor y entender tus patrones
- Es la base para cambiar hábitos y pensamientos
Ejercicio de observación
Paso 1: Observá sin juzgar
Durante una semana, prestá atención a qué te decís a vos misma. No trates de cambiarlo, solo observá.
Paso 2: Anotá patrones
¿Te hablás con cariño o con dureza? ¿Te alentás o te criticás? ¿Qué frases repetís?
Paso 3: Identificá el tono
¿Es compasivo, crítico, ansioso, optimista? Cada tono te da información valiosa.
Preguntas para reflexionar
Sobre el tono:
- • ¿Cómo me hablo cuando cometo un error?
- • ¿Qué me digo cuando algo me sale bien?
- • ¿Me trato como trataría a una amiga?
- • ¿Me doy ánimos o me desanimo?
Sobre el contenido:
- • ¿Qué frases repetís más?
- • ¿Te enfocás en lo que falta o en lo que tenés?
- • ¿Te hablás en segunda persona ("vos") o primera ("yo")?
- • ¿Usás palabras de aliento o de crítica?
Señales de alerta
🚨 Prestá atención si:
- • Te hablás con mucha dureza y crítica
- • Usás palabras como "nunca", "siempre", "todo", "nada"
- • Te comparás constantemente con otras personas
- • Te decís cosas que nunca le dirías a una amiga
Cómo empezar a cambiar
Detenete
Cuando te des cuenta de que te estás hablando mal, pará
Preguntate
"¿Le diría esto a una amiga?"
Reformulá
Decilo de una manera más amable y realista
💡 Consejo profesional
El cambio en el diálogo interno es un proceso gradual. No te exijas cambiar de un día para el otro. Empezá siendo más consciente de cómo te hablás, y poco a poco vas a poder modificarlo.